Billie Eilish es la gran estrella nacida en este siglo y, cómo tal, desde muy pequeña, conoce los peligros del bodyshaming. Desde su más tierna adolescencia ha tenido que lidiar con una personalidad depresiva y con la exposición que le da la fama. Su opción fue protegerse. Ha declarado en multitud de ocasiones que siempre aparece con ropa muy ancha en público para que nadie sepa como es su cuerpo y evitar las críticas que han creado problemas a otras estrellas como Taylor Swift o Lady Gaga. Sin embargo, cada vez que se le abría un poco la cazadora o se intuían sus pechos, su figura se convertía en noticia mundial, sin importar que aún tuviese 15, 16 o 17 años. El pasado enero cumplió 18 y, sin nadie saber como es su cuerpo, ella misma compartió noticias que la ponían ese mismo día como la gran búsqueda en Pornhub.

El problema del bodyshaming para una estrella mundial es querer gustar a todo el mundo, algo imposible. Es decir, las críticas siempre te van a venir por algún lado. Como decía Taylor Swift en su documental de Netflix Miss Americana: "si tienes el vientre plano no tienes el culazo que todos quieren, si tienes el culo, tienes tripa, es jodidamente imposible". Eilish sigue con su opción de "no dejar que nadie sepa nada" pero, hasta por eso la critican porque, atención a la gilipollez, "vestir ancho no es femenino". El pasado 12 de marzo nos hacíamos eco de un vídeo que había comenzado a mostrar en su tour en la que, desnudándose mientras la inunda el agua oscura, hablaba de esta tendencia tóxica. Hoy, con la gira suspendida para lo que queda del año debido al Coronavirus, Eilish ha tenido a bien subir el cortometraje completo a Youtube. Dirigido por ella, como su último y exitoso videoclip, va acompañado de un contundente mensaje en voz en off. Uno que, como toda buen reflexión, tiene muchas más preguntas que respuestas:

¿Me conoces? ¿Realmente me conoces?tienes opiniones sobre mis opiniones, sobre mi música, sobre mi ropa, sobre mi cuerpo.Alguna gente odia lo que visto, alguna gente lo adora, alguna gente lo usa para avergonzar a otros, alguna gente lo usa para avergonzarme.Pero te siento viéndome, siempre. Nada de lo que hago no se ve. Mientras, siento que me observas, que me desapruebas o suspiras aliviado.Si vivo en torno a ello, nunca podría ni moverme ¿Quieres que sea más pequeña?¿Más enclenque?¿Más blanda?¿Más alta?¿Te gustaría que me estuviese callada? ¿Te provocan mis hombros? ¿Lo hace mi pecho? ¿Y mi estómago? ¿Mis caderas? ¿El cuerpo con el que nací no es lo que querías?

Si visto algo confortable no soy una mujer. Si me quito capas, soy una puta. Aunque nunca has visto mi cuerpo todavía lo juzgas ¿Por qué?

Hacemos asunciones sobre personas basadas en su talla, decidimos quienes son y lo que valen.Si visto más, si visto menos ¿Quién decide que eso me hace? ¿Qué significa? ¿Está mi valor basado solo en tu percepción? O es que tu opinión de mí no es mi responsabilidad.

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